viernes, 11 de noviembre de 2016

Sistema y estructura del Sistema Educativo (1)

En esta primera entrada en el blog, vamos a hablar sobre la estructura del Sistema Educativo. Vamos a plantearnos diversas preguntas y vamos a responder a estas cuestiones. En esta primera entrada vamos a responder a dos cuestiones muy planteadas actualmente en la sociedad:

 - ¿Hay un fomento de la carrera profesional en el profesorado?, y
 - ¿Es eficaz la evaluación del sistema educativo? 

 A continuación se va a responder a estas cuestiones.


¿Hay un fomento de la carrera profesional en el profesorado?

En un primer momento vamos a establecer la titulación necesaria para acceder a dar clase en los diferentes estratos del Sistema Escolar:
EDUCACIÓN
TÍTULO REQUERIDO
Educación Infantil
Grado en Magisterio o Grado Superior de FP en educador infantil
Primaria
Grado en Educación Primaria
Secundaria/Bachillerato/FP
Grado en una determinada especialidad + Máster “Maes”
Universidad
Grado + Máster + Doctorado

Vemos pues, en la anterior tabla, como el profesor docente antes de acceder a la enseñanza tiene que tener una dura preparación, más compleja y dificultosa conforme se va ascendiendo en los estratos educativos (hay que estudiar más, para ser Educador Infantil que para dar clases en al universidad). A esto tenemos que añadir que todos los graduados, para obtener el título de grado deben acreditar como mínimo un nivel B1 en cualquier idioma extranjero.

Pero, ¿una vez que los profesores consiguen su plaza, necesitan seguir formándose? ¿es obligatorio?

La respuesta es que sí. En España existen numerosos congresos sobre la llamada Formación Permanente del Profesorado, esto es, el continuo aprendizaje por parte del profesor, para entre otras cosas, adecuar los conocimientos que va a enseñar a las épocas en las que se va a ir encontrando a lo largo de su carrera docente. Por poner un ejemplo, un profesor que comenzara la docencia en el 1980, hoy en día, tras 30 años como docente, ha experimentado numerosos cambios en la sociedad, además de importante revolución de la tecnología y su aplicación al aula (ordenador, power point, presentaciones, transparencias). Este profesor ha necesitado ir adaptando su currículo a la época en la que ha ido trabajando, por lo tanto ha estado en continua formación.

Podemos ver por ejemplo, como existe un congreso dedicado a esta renovación continua en la formación del profesorado, denominado “Congreso Internacional de Nuevas Tendencias en la Formación Permanente del Profesorado”, organizado en parte por la Universitat de Barcelona[1].

Pero no hace falta irse tan lejos para ver cuanta importancia se le da a este tema. Podemos observar como la Junta de Andalucía, desde la Conserjería de Educación publica periódicamente cursos de formación para el profesorado[2].

Teniendo en cuenta todo esto, vemos como las organizaciones públicas ven imprescindible esta continua formación del profesorado, ya sean educadores infantiles o catedráticos de historia del arte (por poner un ejemplo). Pero con respecto a este último grupo, los doctorados y catedráticos, además se les exige escribir un determinado número de artículos en revistas científicas, así como asistir a determinadas conferencias, estando en continua formación e investigación.
Por todo esto la carrera profesional del profesorado, está en continua evolución y aprendizaje, basándonos en lo anteriormente citado y las fuentes consultadas, o por lo menos así debería ser.




¿Es eficaz la evaluación el sistema escolar?

En otras palabras, ¿la evaluación a la que está sometido el alumnado es positivo para el sistema y para el propio alumnado?

Todos, desde los cursos más tempranos de la educación primaria hemos sido objeto de evaluaciones, ¿pero qué se consigue con esto? El sociólogo Enrique Martín Criado de la Universidad de Sevilla, propone que la escuela busca la igualdad de todo su alumnado (esto nadie lo va a negar), pero que esta igualdad no la encontramos en el sistema escolar, debido a las diferencias a las que se somete el alumnado en función de su nota en las asignaturas que se imparten en las aulas[3]. Es pues, ¿más listo el que saca mejores notas? O simplemente, ¿es el que mejor se adapta al sistema escolar, indiferentemente de sus habilidades? Este es un debate muy interesante, que por la brevedad de la que aquí disponemos, no es preciso ahondar en ella.

Lo que todos tenemos claro, o eso parece ser, es que el sistema escolar necesita de una evaluación de sus alumnos, para premiar a los que más estudian y dar más oportunidades laborales a éstos frente a los otros. Desde que la escuela es escuela, las calificaciones han estado ahí, ¿pero son realmente eficaces? Por poner un ejemplo, a Albert Einstein le dijo su profesor que no valía para estudiar. Esto nos hace plantearnos muchas cuestiones, ¿estamos podando la inteligencia de los alumnos por no conectar ésta con lo que se enseña en el sistema escolar (cultura general)? ¿Por qué se enseñan matemáticas y no un instrumento musical, o por ejemplo a hacer cerámica?




Personalmente, no considero que el sistema de evaluación sea negativo o deficiente, pero sí que en el sistema educativo no se abren las puertas a todos los campos a los que una persona puede dedicar su vida. Puede ser que nos perdamos genios entre las aulas por no encontrar éstos en ellas ninguna materia de su interés.

Hay personas que piensan que esta evaluación, la actual, es la salvación para el abandono y fracaso escolar:

 “La evaluación continua y repetida en el tiempo fundamental, más si cabe en España, aquejada de un grave problema de fracaso y abandono escolar. La acción conjunta de familias y escuelas y la intervención temprana permitirán reducir paulatinamente estas tasas, fortaleciendo a la postre la equidad en el acceso al sistema educativo”[4]

Este párrafo de Santín, D. y Sicilia, G. viene a decir lo anteriormente explicado: la evaluación como sistema para mejorar el abandono y fracaso escolar.

¿La solución al fracaso y abandono escolar radica entonces en una evaluación más dura, o por el contrario debemos de crear una escuela más dinámica para de esta manera motivar al alumnado y ver que no hay alumnos "buenos" o "malos", sino materias que se te dan "mejor" o "peor?

Piensen...y !gracias!

¡ESPERO QUE HAYA SIDO DE VUESTRO AGRADO! 
Cualquier duda o sugerencia, pueden ponerla en un comentario y se os reponderá con la mayor brevedad posible.

Pasen un bonito día =)



 Bibliografía.
- Gimeno Sacristán, José (2010). La carrera profesional para el profesorado. Valencia. Universidad de Valencia.
- Imbernón, Francisco. La profesión docente ante los desafíos del presente y del futuro. Universidad de Barcelona.
- Estefanía Lera, Jose Luís (2011). La participación en la formación y la práctica docente. (Artículo)






[1] http://www.ub.edu/obipd/v-congreso-internacional-de-nuevas-tendencias-en-la-formacion-permanente-del-profesorado-25-27-de-julio-del-2016-punta-cana-republica-dominicana
[2] http://educacionadistancia.juntadeandalucia.es/profesorado/
[3] Martín Criado, Enrique. El idealismo como programa y como método de las reformas escolares. Universidad de Sevilla.
[4] http://www.sociedadyeducacion.org/blog/hacia-un-sistema-educativo-eficiente-la-evaluacion-como-instrumento-de-mejora/

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